Obra de Investigación 2017, a cargo del laboratorio escénico "Workshop" perteneciente a la Escuela de Artes Escénicas "La Seducción" (Granada).
Nunca podré olvidar el gesto, la decisión de algunas personas. A veces, girar la cabeza y responder a esos gestos, y saber dónde debes prestar atención, es lo que nos cambia la vida. Nunca olvidaré esa decisión que tomaron Marcos y María, directores de la Escuela de Artes Escénicas "La Seducción", cuando decidieron llamarme...
Se acerca el verano, la luz y el calor no eran los mismos que hacía unos meses atrás. José Luís quería descubrir qué es lo que se hacía en una de mis sesiones y yo quería comprender qué era capaz de mostrar de sí mismo. De nuevo combinamos la naturaleza y el retrato para lograrlo.
Un hombre que esconde muchos secretos, cargado de cosas que ofrecer. Un placer compartir confidencias contigo.
Por esta vez, el bosque, el sonido del río a lo lejos y la tranquilidad no fueron suficientes. Andi y yo recorrimos este lugar abandonado durante un par de horas y lo convertimos en nuestro hogar.
En silencio y con la cabeza llena de ideas, íbamos llenando el espacio con nuestra esencia.
Nala es una boxer con una energía increíble; tanto que, cuando salimos a hacer una sesión de fotos especial para ella, no podía dejar de corretear de un lado para otro y jugar. Estos perros, me dijeron, no saben cuándo parar y no descansan hasta que no pueden más.
Tristemente, hace unos meses enfermó y tuvo que ser sometida a un tratamiento muy duro y a varias intervenciones quirúrgicas. Ahora está estable pero sus padres, Javi y Alejandro, se llevaron un buen susto.
¿A que es genial cuando delante de la cámara tienes a gente tan guapa? Esa es la sensación que tuve yo al trabajar con Mari y Rafa. Un auténtico placer. Os dejo con las imágenes de la colaboración conjunta con Raquel Ruyz.
Almería es un lugar lleno de rincones. Éstos le dan una magia que en pocos lugares existe. Tere y Carlos me llevaron a uno de esos lugares. Un lugar muy escondido que, de primeras, me sorprendió un poco. No entendía porqué allí y no en otro lugar. Cuando encontramos el lugar y nos sentamos lo comencé a entender.
Una de las cosas que más me gusta de esta profesión es lo que aprendo de los demás. Amalia y Pablo me enseñaron muchas cosas este día. Tuve la suerte de ser un invitado más, pues me trataron como tal. Sentarme al lado de ellos, compartir momentos con los invitados y hasta salir en alguna que otra foto.
Una de las cosas que más me gustan de Granada es que tiene grandes rincones donde puedes perderte entre los árboles. Compartir esa magia con Amalia, Pablo y con la pequeña Sara ha sido una experiencia alucinante. Todos teníamos unas ganas increíbles de pasar un día en la naturaleza, rodeados de la paz que te otorgan los bosques.